«Llegará una multa multimillonaria que pagará la ciudadanía y no quienes contaminan»

Grave contaminación en la comarca de A Limia / Fotos: Plataforma Auga Limpa Xa y Sociedade Galega de Historia Natural

*Actualización de 6 de julio de 2020

La advertencias de la UE sólo pueden resolverse frenando a la ganadería industrial.

«Cada vez tenemos menos agua y más contaminada», ha explicado el responsable de agricultura en Greenpeace España, Luis Ferreirim. «Ahora nos ha llegado un dictamen motivado de la Comisión Europea, pero si no actuamos con contundencia llegará una multa multimillonaria que, como siempre, tendremos que pagar la ciudadanía y no quienes contaminan».

«Es más importante tener agua limpia que carne barata. Las fábricas de carne son también auténticas fábricas de cambio climático, de contaminación de acuíferos y de destrucción del tejido social rural, por lo que es urgente una moratoria a la ganadería industrial», advierte Ferreirim.

«Es fundamental ir a la raíz del problema»

En España la ganadería industrial crece a un ritmo vertiginoso. Un ejemplo evidente es que a día de hoy, es el país de la Unión Europea con el mayor número de cerdos. Según los datos de la Comisión Europea, España cuenta ya con más de 31 millones de cerdos censados, mientras que en Alemania, segundo productor europeo, el censo está bajando progresivamente debido, en gran medida, precisamente a los problemas ambientales ocasionados.

La Comisión Europea exige designar más zonas vulnerables a la contaminación por nitratos y aumentar los controles. No obstante, Greenpeace considera que eso no es suficiente. «Es fundamental ir a la raíz del problema: poner fin a la ganadería industrial y plantear a medio plazo una reducción drástica del número de animales criados en régimen intensivo».

Foto: Greenpeace

*Actualización de 3 de julio de 2020

Europa amenaza con llevar a España al Tribunal de Justicia por la contaminación por nitratos

La Comisión pide a España que se protejan las aguas de la contaminación por nitratos y da un plazo de tres meses antes de decidir si el asunto se lleva al Tribunal de Justicia de la Unión Europea.

El paquete de procedimientos de infracción de julio de 2020 llegó con varios recados en materia ambiental para el gobierno español por incumplimientos acumulados en la gestión de las administraciones durante los últimos años. Una de las relevantes advertencias es la petición que la Comisión Europa hace a España para el cumplimiento de la Directiva sobre nitratos [Directiva 91/676/CEE del Consejo].

Esta Directiva tiene por objeto proteger las aguas superficiales y subterráneas de Europa de la contaminación procedente de fuentes agrarias exigiendo a las autoridades que tomen medidas para evitar dicha contaminación. En este ámbito, el territorio español ha vivido un acelerado despliegue de macrogranjas en toda la península que han creado graves problemas de salud pública y ambiental y mucho malestar en las comunidades de vecinos que sufren las consecuencias de la contaminación derivada de estas instalaciones.

Primera advertencia en 2018

En noviembre de 2018, la Comisión ya remitió una carta de emplazamiento a España tras lo cual se habrían realizado tímidos avances que, según concluye el estamento europeo, están lejos de solucionar los problemas. La UE considera que España debe garantizar la estabilidad de la red de control de los nitratos, revisar las zonas vulnerables a los nitratos (ZVN) y designar zonas nuevas en varias regiones, incluir todos los elementos obligatorios necesarios en los programas de acción contra los nitratos de varias regiones y adoptar medidas adicionales o acciones reforzadas para alcanzar los objetivos de la Directiva en varias regiones.

Al tiempo, la Comisión Europea considera que el ejecutivo español también debe adoptar medidas adicionales en relación con la eutrofización para todo el país, ya que las medidas establecidas hasta la fecha no han logrado los objetivos de la Directiva.

Ante el incumplimiento reiterado, la Comisión pasa al segundo nivel de advertencia emitiendo ahora un dictamen motivado. Si en un plazo de tres meses no hay un plan sobre la mesa para subsanar las deficiencias detectadas, la Comisión remitiría el asunto al Tribunal de Justicia de la Unión Europea.

Descontrol de la ganadería industrial

El caso del Mar Menor es uno de los más mediáticos en tiempos recientes donde las ingentes cantidades de nitratos y pesticidas se unen a otros problemas como regadíos intensivos, desalobradoras, pozos ilegales por doquier y «urbanización salvaje» para el desolador escenario que ha llevado a miles de ciudadanos a manifestarse por la gravedad de la situación y la «desidia administrativa» con la situación del Mar Menor.

Pero la península está llena de ejemplos de los que hemos hablado en otras ocasiones. Por ejemplo, el caso de la comarca ourensana de A Limia, donde 20.000 habitantes «soportan residuos ganaderos equivalentes a fecales de 1.600.000 personas». O el colapso de suelos y acuíferos al borde en Castilla-La Mancha donde lejos de tomarse medidas se sigue favoreciendo este tipo de instalaciones. Castilla y León cuenta también con numerosos puntos negros, como el caso de la pequeña localidad de Lastras de Cuéllar, que poníamos de ejemplo en mayo de 2020: Seis años de aguas contaminadas y ahora confinados y sin poder beber del grifo.