La galería de los horrores de los mercaderes de la llamada «medicina» tradicional oriental ha sido un tema recurrente en tiempos recientes en nuestras páginas. La actualidad nos ha traído muchos, demasiados, ejemplos, de como se ponen en peligro cientos de especies animales debido a delirantes supersticiones relacionadas con la ‘medicina’ tradicional. La que traemos hoy tiene el agravante de que ha sido bendecida por las propias autoridades. Se trata de la supuesta bondad de la bilis de oso para tratar la enfermedad Covid-19 causada por el coronavirus que ha originado la actual pandemia planetaria.
Sin ninguna evidencia científica que lo apoye, el gobierno chino ha añadido un producto que contiene bilis de oso para tratar casos graves de Covid-19. El hecho de que un producto de este tipo se haya colado en una lista oficial de tratamientos autorizados para esta enfermedad ha indignado a muchos expertos (a día de hoy no tenemos noticia de que se haya suprimido todavía de esa lista). La recolección de bilis de oso de ejemplares en cautiverio de este animal es de hecho legal en China.
No obstante, como era de esperar, la existencia de una demanda ha hecho que osos salvajes sean ilegalmente capturados para obtener la sustancia. Una triste paradoja que explica mucho de como hemos llegado hasta aquí: se están matando animales salvajes para, supuesta y erróneamente, tratar de curar una enfermedad originada, precisamente, por la obsesión por sacrificar animales salvajes para satisfacer dudosos apetitos.