Europa frena el peligroso mancozeb, la primera vez que no renueva un disruptor endocrino

El mancozeb es un pesticida asociado a daños reproductivos y hormonales.
Dron fumiga un campo verde a poca distancia del suelo

Peras, uvas, patatas, tomates o cebollas son productos en los que se ha detectado un uso extenso del plaguicida denominado mancozeb, según han denunciado diversos grupos ambientales y de consumidores. Se trata de un disruptor endocrino con evidencia científica sobre su capacidad tóxica para la reproducción. Y, por vez primera, la Unión Europea ha decidido en otoño de 2020 no renovar el permiso a este plaguicida, denominado mancozeb.

Es la primera ocasión en que un plaguicida se elimina del mercado por sus daños al sistema hormonal, un triunfo para las personas que han luchado para que la normativa tenga en cuenta los graves daños a la población y la biodiversidad actual y futura que causan este tipo concreto de tóxicos.

Aun así, el Mancozeb es un ejemplo más de la falta de precaución y la lentitud del sistema europeo de autorización de pesticidas. Han hecho falta 60 años de exposición y de estudios independientes que demostraran la peligrosidad de este tóxico, para que se tomen medidas para eliminarlo.

El séptimo más vendido en España

Según explicaban desde el grupo `Libres de contaminantes hormonales’, de Ecologistas en Acción, el plaguicida disruptor endocrino que desaparecerá de nuestra comida se llama Mancozeb y es un ditiocarbamato. Los ditiocarbamatos son fungicidas de contacto, que se utilizan para impedir el crecimiento de hongos y moho en una amplia variedad de cultivos como peras, uvas, patatas, trigo cebollas, etc.

Es el séptimo plaguicida más vendido en España según los últimos datos disponibles de 2018 (no publicados aún), por lo que la decisión europea se ha enfrentado a una fuerte presión de la industria de pesticidas.

El mancozeb está registrado y lleva comercializándose desde 1961. A pesar de esto, la EFSA (Autoridad de Seguridad Alimentaria de la UE) sólo ha emitido una vez una opinión sobre este plaguicida, concretamente en 2019.

Presión para que la UE prohíba el peligroso pesticida mancozeb

*Actualización 21 de marzo de 2020

El mancozeb es un fungicida que una amplia literatura científica ha asociado a diferentes efectos posibles sobre la salud. Uno de los metabolitos de este tipo de pesticidas- es decir de las sustancias en que se convierten al entrar en contacto con organismos vivos- la (ETU), ha sido asociada por ejemplo a defectos de nacimiento y cáncer en animales de laboratorio.

El mancozeb fue aprobado en la UE en el año 2006 para un uso muy amplio, en base a datos dudosos. Esta aprobación debería haber sido revisada en 2016 por la Comisión Europea, pero no se hizo alegando una alta carga de trabajo, y se extendió la autorización sin más. La última prórroga, en 2019, fue objetada por el Parlamento Europeo.

Está previsto que el Comité Permanente de Vegetales, Animales, Alimentos y Piensos de la UE se reúna los días 23 y 24 de marzo, donde se decidirá si este pesticida, que a modo de ejemplo es el séptimo más usado en España, sigue autorizándose. Frente a este debate, de un lado está la iniciativa europea Pan Europe (Pesticide Action Network), que apoyan asociaciones como Amigos de la Tierra, Greenpeace, Hogar sin Tóxicos, Ecologistas en Acción, la Fundación Alborada y Fodesam. En el otro extremo, la resistencia de la industria química y de sectores agrícolas que se han hecho dependientes de esta sustancia para sus cultivos, pese a que, como subrayan los ambientalistas, existen alternativas.

Causante de problemas de tiroides

El mancozeb figura como una sustancia tóxica para la reproducción de categoría 1B, según la Agencia Europea de Susancias Químicas. Es decir, está perfectamente probado su efecto adverso en la reproducción en animales de laboratorio aunque aún no existan suficientes estudios epidemiológicos en humanos.

También la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) concluye que es un disruptor endocrino, es decir, una sustancia con capacidad de alterar el funcionamiento del sistema hormonal en seres humanos y muy probablemente en otros organismos no objetivo.

Una de las mayores preocupaciones de los ditiocarbamatos es que su metabolito, el etilenotioureum puede afectar a la tiroides, causando bocio. Este metabolito está relacionado también con defectos en el nacimiento y cáncer en animales de experimentación. Además, el etilenotioureum ha sido clasificado como posible cancerígeno por la Agencia de Protección Ambiental (EPA) de los EEUU.

Se acumulan las evidencias científicas contra el mancozeb

La Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) emitió una opinión sobre el mancozeb en el año 2019 con datos preocupantes, de los que se desprende que su uso está desaconsejado. Es una sustancia que puede causar alteraciones hormonales y es tóxica para la reproducción, además de representar riesgos importantes para aves, mamíferos, insectos y organismos del suelo.

Por otro lado, el Comité de Evaluación de Riesgos (RAC) de la Agencia Química Europea (ECHA) había clasificado al mancozeb como sustancia «tóxica para la reproducción 1B» (R1B) debido a la gravedad de las malformaciones cerebrales observadas en la descendencia, causadas por el metabolito antes citado (ETU). El prestigioso Collegium Ramazzini de Bolonia asoció esta sustancia con ocho tipos de cáncer diferentes. Otras investigaciones lo han asociado a problemas tiroideos o a neurotoxicidad (como el Parkinson).

La conclusión de ser un pesticida reprotóxico clasificado, ya sería suficiente para una prohibición, en aplicación de la Directiva 1107/2009, Anexo II, 3.6.4 de la UE. Hans Muilerman, de la organización PAN Europe, especializada en la problemática de los pesticidas, considera que «probablemente no haya otro pesticida con más razones para ser prohibido». Además, denuncia que la industria está intimidando a la EFSA y a la Comisión Europea diciendo que puede llevarles a los tribunales porque parte de los datos que manejan sobre el pesticida son confidenciales.

El mancozeb es masiva e innecesariamente utilizado

En países como España el mancozeb llega a usarse hasta diez veces una misma temporada de una manera totalmente innecesaria porque existen alternativas. Por ejemplo, en el caso las patatas, hay numerosas variedades que son resistentes a los hongos más comunes, y que son las que se usan en los cultivos de agricultura ecológica. Las entidades que solicitan la prohibición del pesticida consideran que debe potenciarse la agroecología como alternativa a una agricultura industrial excesivamente basada en la química, que genera serias preocupaciones ambientales y sanitarias.

Andrés Muñoz , de Amigos de la Tierra demanda «aprovechar el marco de la nueva PAC para el periodo 2020-2027 y la futura Estrategia europea Farm to Fork, con el fin de alcanzar el objetivo de eliminar gradualmente los plaguicidas sintéticos en la agricultura de la UE en un 80% para 2030, empezando por los más peligrosos como el mancozeb, para alcanzar la supresión al 100% en 2035». En opinión de Carlos de Prada, de Hogar sin Tóxicos, «sería importante que el Gobierno español se mostrase favorable a la prohibición de esta sustancia, evidenciando así su compromiso con una transición hacia una agricultura que deje de ser dependiente del uso de unos pesticidas que comprometen la salud y el medio ambiente».

Por su parte, Koldo Hernández, de Ecologistas en Acción, considera que «el derecho humano a la alimentación exige el acceso a alimentos de calidad libre de sustancias tóxicas, por lo que demandamos al Gobierno español que apoye la prohibición de este pesticida y de cuantos otros supongan un riesgo inaceptable para el medioambiente y la salud humana».