Objetivo: 350 manadas de lobo en 2030

El borrador de la Estrategia para la Conservación y Gestión del Lobo propone su inclusión en el listado de Protección Especial.

lobo entre árboles
Imagen de Zdeněk Chalupský en Pixabay

Para garantizar la conservación a largo plazo de la especie se propone alcanzar las 350 manadas de lobo en España para el año 2030, reducir la persecución ilegal del lobo y aumentar entre un 10 y un 20% el área de distribución actual para el año 2030. Actualmente, y de acuerdo con los datos recopilados en el último censo nacional coordinado realizado en 2013-2014, existen unas 300 manadas de lobo en España.

La propuesta se ha conocido este noviembre de 2020 tras difundirse detalles del borrador de la Estrategia para la Conservación y Gestión del Lobo en España, que propone homogeneizar el estatus de protección de la especie a nivel estatal, incluyendo a todas las poblaciones españolas en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial, y unas líneas de acción prioritarias para que la gestión y conservación del lobo sea coherente en todo el territorio español, asegure sus poblaciones y distribución a largo plazo y garantice la coexistencia con el hombre.

Actuaciones prioritarias para proteger al lobo

En este sentido, el documento propone la inclusión de todas las poblaciones españolas de lobo en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial, tal y como aconsejó el dictamen del Comité Científico al considerar «su importancia como patrimonio cultural, científico, así como los servicios ambientales que produce la presencia de esta especie en los ecosistemas naturales».

El objetivo es lograr la conservación, gestión y restauración de poblaciones viables de lobos como parte integral de los ecosistemas españoles asegurando la coexistencia con el hombre.

Además, como líneas de actuación prioritarias para mejorar el estado de conservación del lobo se propone la adecuación de las infraestructuras lineales capaces de generar potencialmente efecto barrera y mortandad en el lobo, siguiendo los principios de actuación incluidos en la Estrategia Nacional de Infraestructura Verde y de la Conectividad y Restauración Ecológicas; la promoción de bosques-isla en zonas agrícolas que sirvan de áreas de refugio y reproducción de la especie y que permitan mantener la conectividad con otras áreas, y el establecimiento de un programa coordinado a nivel nacional de seguimiento y control de enfermedades transmisibles del lobo, entre otras acciones.

Nuevo censo de lobos en 2021

La estrategia ha sido elaborada por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico y las Comunidades Autónomas en el seno del Comité de Flora y Fauna Silvestres de la Comisión Estatal para el Patrimonio Natural y la Biodiversidad. En la reunión se ha procedido a una primera puesta en común del documento y se espera continuar el proceso de revisión y su enriquecimiento técnico con aportaciones de todos los agentes implicados en la gestión del lobo en España.

La Estrategia pone de relieve que para asegurar la pervivencia en el tiempo de esta especie hace falta la colaboración de todos los agentes sociales, por lo cual se promoverán acciones de divulgación para conseguir el apoyo social para la conservación y recuperación de este animal emblemático. Entre otras, la Estrategia plantea incentivar la participación social en la toma de decisiones con el establecimiento de una mesa sectorial de diálogo sobre el lobo con naturalistas, ONG profesionales de la ganadería, personal técnico, ayuntamientos, sector de la ciencia, administraciones, cazadores, profesionales del turismo, etc.

Con el objetivo de avanzar en el conocimiento de la especie, se propone la realización de un nuevo censo de lobos durante los años 2021-2022 y se recomienda su actualización cada cinco o seis años, con la actualización anual de su área de distribución.