Por la extrema situación en la que viven sus animales.

Alertados por vecinos de la zona en septiembre de 2020, la asociación AnimaNaturalis se interesó por la grave situación de decenas de animales encerrados en una finca. Cuando un equipo de la organización acudió al lugar se encontró lo que califican de «panorama desolador».
«Decenas de cerdos en unas condiciones horribles, sobreviviendo como podían, viviendo entre cadáveres y entre montañas de barro y purines, animales heridos sin ningún tipo de atención veterinaria, y un becerro que vivía todo el tiempo atado con una cadena de menos de un metro que apenas le permitía moverse o tumbarse», explican.
Documentación del caso a disposición de autoridades
AnimaNaturalis realizó varias «visitas infiltradas» para documentar «cómo el hombre que gestiona la granja alimentaba a los animales únicamente con pan seco y neulas, y que no disponían de la ventilación e iluminación necesaria y obligatoria según la ley».
Según informan en un comunicado, han puesto todo el material audiovisual a disposición del Seprona y de la Consejería de medio rural, ganadería, pesca, alimentación y medio ambiente de Cantabria. Los hechos descritos pueden ser constitutivos del delito de maltrato animal a la luz del artículo 337.1 del Código Penal. «No se debe atar a los terneros, lo dice claramente la ley, excepto en determinadas circunstancias y de manera puntual. Este pobre ternero vivía permanentemente atado», explica Cristina Ibáñez, encargada del departamento legal de AnimaNaturalis.
⚠️Denunciamos a un ganadero por la extrema situación en la que viven los animales en una granja en Villaescusa (Cantabria 🇪🇸) con el fin de que le sean decomisados y se le inhabilite para su tenencia.
El ternero fue rescatado y llevado a un santuario.https://t.co/XxUrRITfgt pic.twitter.com/GsP27gOvQh
— AnimaNaturalis (@AnimaNaturalis) November 2, 2020