Golpe al tráfico de marfil en España a través de la Operación Celacanto

Foto: Guardia Civil
A principios de este verano de 2019 la Guardia Civil informaba, en el marco de la operación “Celacanto”, de la detención o investigación de más de 200 personas por tráfico ilegal de especies protegidas y delitos relacionados con el incumplimiento del Convenio CITES y de la normativa de contrabando o falsedad documental. Asimismo, comunicaban la aprehensión de 2.296 especímenes de 70 especies de fauna protegidas.

La operación, desarrollada en tres fases, dedicó en la tercera de éstas una atención especial al tráfico de marfil. Dentro de la llamada Operación Thunderball y bajo la coordinación de Interpol, se centraron en la lucha contra el tráfico ilícito de marfil de elefante africano. De las 1.669 incautaciones realizadas, entre especímenes de varias especies y artículos derivados de las mismas, destacaban 543 piezas de marfil. Estas piezas estaban valoradas en más de 400.000 euros, tanto tallado como colmillos en bruto.

Así se descubre el marfil ilegal con la técnica del Carbono 14

Además, por vez primera en España se ha usado la técnica del Carbono 14 para realizar dataciones del marfil. En el caso de tratarse de antigüedades y según la normativa europea suscrita por España para comerciar con piezas de marfil tallado no es necesario certificado CITES, siempre que se pueda demostrar que los objetos tengan una antigüedad anterior al 3 de marzo de 1947. A fin de demostrar que una pieza de marfil es anterior a la fecha indicada, hasta ahora era frecuente aportar un certificado de antigüedad emitido por parte de un anticuario experto. Recientemente, el Ministerio de Transición Ecológica (MITECO) ha impulsado la puesta a punto de una metodología basada en el análisis de radioisótopos de C14 para la datación del marfil.

La utilización de la citada técnica permite comprobar de forma científica la veracidad de estos documentos. Puede así establecerse con un alto grado de precisión la antigüedad de la pieza de marfil objeto de estudio. De esta forma, resulta sencillo detectar piezas de marfil que, amparándose en haber sido certificadas como antigüedades, son objeto de comercio ilícito fuera del control de las autoridades favoreciendo el tráfico ilegal de este material. Durante la operación se ha llevado a cabo la extracción de numerosas muestras obtenidas de las piezas de marfil intervenidas. Actualmente, estas muestras se encuentran en fase de análisis mediante espectrometría de masas con acelerador (AMS) en el Centro Nacional de Aceleradores. Se trata de un centro mixto de la Universidad de Sevilla y del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), único centro en España con capacidad para llevar a cabo los citados análisis.

En la operación han participado agentes pertenecientes al Seprona apoyados por unidades como el Servicio Fiscal, Servicio de Criminalística y de Seguridad Ciudadana de la Guardia Civil. Asimismo, se ha contado con la colaboración del Ministerio para la Transición Ecológica, y del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, como autoridad administrativa CITES.