Se anunciaba un tratado «histórico» para los océanos, pero no hay ningún compromiso serio

océano con velero al fondo en la línea del horizonte
Imagen: DigitalKeneddy – Pixabay

La tercera ronda de negociación del Tratado Global de los Océanos de la ONU finaliza sin avances.

De reunión en reunión, de ciudad en ciudad, de año en año… Los discursos, plagados de retórica voluntarista, parecen esperanzadores en ocasiones… Pero a la hora de cumplir en la práctica con los compromisos posibles, los acuerdos parecen a años luz. Y mientras, el problema de los océanos no sólo no afloja, sino que la situación se agrava rápidamente. La sobrepesca, las explotaciones mineras, prospecciones petrolíferas, la acumulación de plásticos… Por no hablar de la crisis climática y todos los factores vinculados a este desafío.

La sede de la ONU en Nueva York acogió la última escenificación del débil compromiso internacional. Fueron delegaciones de más de 190 países las que se reunieron en esta tercera ronda de negociaciones para el Tratado Global de los Océanos. Pero finalizado el evento después de dos semanas de debates, sobre la mesa no hay ningún documento sólido que llame al optimismo. De hecho, países como Rusia, Islandia o Corea con claridad se han esforzado por retrasar las negociaciones. La sesión final de este proceso está programada para el primer semestre de 2020. Pero, a día de hoy, no parece haber gran voluntad política para una protección real de los océanos. Sobre los ya frágilmente respetados acuerdos anteriores no parece preverse una mejora sustantiva.

«Alarmante falta de voluntad política»

«Es muy decepcionante ver que el ritmo y la ambición presentes en esta reunión no coinciden con el nivel de urgencia necesario para salvar nuestros océanos y proteger nuestro planeta contra la emergencia climática y la pérdida masiva de biodiversidad que afrontamos».

«La falta de voluntad política en estas negociaciones es alarmante»

Son declaraciones de la doctora Sandra Schoettner, de la campaña de Océanos de Greenpeace, que añade: «La falta de voluntad política en estas negociaciones es alarmante, ya que algunos países claramente todavía favorecen la explotación de los recursos marinos sobre su protección. Mantener las cosas como están no va a salvar nuestros océanos o, en última instancia, a la humanidad». A día de hoy solamente el 1% de los mares mundiales está debidamente protegido. Los océanos esperan respuesta.