
Un estudio de la World Weather Attribution no deja lugar a dudas respecto a la crisis climática como origen de las recientes situaciones extremas.
No es excepcional que diversas zonas del planeta periódicamente sufran incrementos de temperatura puntuales en la época estival, pero sí son excepcionales las características concretas de estas olas de calor. Un informe reciente de World Weather Attribution llama la atención sobre los elevados incrementos de temperatura de estos episodios. Sus conclusiones son claras. Hace un siglo, eventos como los del pasado mes de junio, donde una ola de calor achicharró Europa, habrían mostrado temperaturas de hasta 4ºC por debajo de las cifras registradas en la actualidad.
Estudiando los modelos climáticos y combinando modelos y observaciones, este equipo de científicos concluye que la ola de calor se hizo al menos 5 veces más probable en las circunstancias actuales. Los expertos en ciencia climática advierten que este estudio ratifica que el cambio climático provocado por el hombre está causando un aumento en la frecuencia de las olas de calor así como un incremento en su intensidad. Y será cada vez más probable que se produzcan eventos climáticos cálidos intensos sin precedentes.
será cada vez más probable que se produzcan eventos climáticos cálidos intensos sin precedentes
Tendencias muy improbables sin el impacto del cambio climático
Los expertos consideran que la ola de calor de julio de 2019 fue tan extrema en Europa Occidental que las magnitudes observadas habrían sido extremadamente improbables sin el cambio climático. En los países europeos donde millones de personas padecieron la ola de calor, las temperaturas habrían sido de 1,5 a 3º C más bajas en un mundo sin cambio climático provocado por el hombre. Temperaturas similares ocurrirían una vez cada 1.000 años sin el cambio climático, según el informe científico.
La tendencia es todavía más preocupante. Uno de los miembros del equipo, Robert Vautard, ha explicado, según recoge Radio France, que para 2050 tendremos olas de calor de 2 a 3 grados más altas que las de hoy. En su opinión, los datos avalan que Europa necesita acostumbrarse a estas olas de calor, que probablemente se harán más frecuentes e intensas. Vautard sostiene que las temperaturas continuarán subiendo y si no actuamos sobre el cambio climático y sobre las emisiones estas olas de calor en sólo tres décadas rondarán medias máximas de hasta 45º. Esto creará un contexto complejo para la agricultura e impactará sobre los recursos hídricos, causando tensiones sociales para las que, advierten los expertos, quizás no estamos preparados.
Para realizar este estudio, los científicos calcularon las probabilidades de que este tipo de calor ocurriera ahora. También la frecuencia con la que habría ocurrido en un mundo en el que no existiera el calentamiento global provocado por el hombre. Y compararon ambas magnitudes. Para crear las simulaciones utilizaron ocho conjuntos diferentes de modelos informáticos complejos.
Fuente: Human contribution to the record-breaking June 2019 heat wavein France