SEO/BirdLife rechaza esta medida para solucionar un problema que surge de «una anacrónica gestión y planificación hidrológica».
Ejecutar transferencias de agua hacia Daimiel sería, según SEO/BirdLife, asumir la incapacidad de las Administraciones Públicas de España de conservar un parque nacional declarado de interés general del Estado. Es lo que concluyen desde el colectivo ante la grave situación que está pasando el Parque Nacional de las Tablas de Daimiel, con solo 69 hectáreas encharcadas de sus cerca de 2.000 hectáreas inundables.
El colectivo reflexiona sobre la medida propuesta que funcionaría como un parche y, opinan, «es una imprudencia que muestra la auténtica desgobernanza en política de aguas y conservación de la naturaleza». Recuerdan que el núcleo del problema, que se está ignorando, está «en la urgente necesidad de redimensionar la demanda del sector agrario de regadío, verdadero origen de los problemas ambientales». Para SEO/BirdLife, la postura oficial frente al problema en Tablas de Daimiel «repite los mismos errores que sufren otros humedales como Doñana y el Mar Menor».
«Estos planteamientos no solo imposibilitan avanzar en la nueva cultura del agua, sino que retrotraen el debate a finales del siglo pasado», ha lamentado en declaraciones Roberto González, responsable del Programa de Aguas de SEO/BirdLife. «Respaldar medidas de esta índole es asumir sin tapujos la incapacidad de las Administraciones Públicas de conservar un parque nacional declarado de interés general del Estado, y clave para la conservación de especies de aves amenazadas como el escribano palustre, el carricerín real o el pato colorado», expone este experto.
Tablas de Daimiel necesita una estrategia eficaz y realista
Asunción Ruiz, directora ejecutiva de SEO/BirdLife apunta que la propuesta oficial «refleja un nulo interés y compromiso por mejorar a largo plazo la implantación de los objetivos y las obligaciones de las normativas europeas. La verdadera necesidad a la que se enfrenta Daimiel es al ahorro de agua de forma realista, redimensionar los consumos de hídricos agrarios y a buscar la adaptación de las demandas a las futuras reducciones del recurso que impondrá el cambio climático. De hecho, en la COP que próximamente se celebrará en Madrid, como país anfitrión debemos mostrar coherencia protegiendo nuestros humedales como ecosistemas clave para mitigar los efectos del cambio climático».