China y Rusia evitan concreciones y Estados Unidos boicotea: la cumbre del clima empieza coja

Cumbre del Clima de Naciones Unidas
Imagen: ONU – Leoy Felipe

El presidente de China, Xi Jinping, no acudirá esta semana a la Cumbre del Clima de la ONU. Una ausencia significativa considerando la importancia de la cita y teniendo en cuenta que China es el país que más contamina del planeta. En sólo un año, el CO2 emitido en China por habitante es incluso más alto que el total conjunto de todos los países de la Unión Europea.

No obstante, los graves problemas ambientales que años de ausencia de normas ambientales en el país han provocado, han hecho saltar algunas alarmas en el país. La preocupación tiene un trasfondo claramente económico, ya que un estudio hecho público en 2018 apuntaba que están muriendo ya anualmente un millón de personas por problemas derivados de problemas ambientales. A mayores, considerando factores relacionados diversos como cosechas destruídas de cultivos básicos, las pérdidas económicas acumuladas cada año son inmensas.

Por este motivo, China ha iniciado ya algunos proyectos de captura de carbono a gran escala. Además, ha entrado fuerte también en el sector de las energías renovables. Con todo, es una incógnita el grado de compromiso que sus delegados puedan traer a esta cita de Naciones Unidas.

Indecisión de Rusia

En la cumbre donde deben concretarse estrategias clave frente a la crisis climática tampoco estará el presidente de Rusia, Vladimir Putin, pese a que Rusia es el cuarto mayor emisor de gases de efecto invernadero del mundo. El ejecutivo ruso se ha resistido también a ratificar el acuerdo climático global. Aunque hace pocos días el primer ministro Dmitry Medvedev anunciaba que implementaría el Acuerdo de París de 2015, la resolución publicada resulta un tanto ambigua, ya que habla de una «adaptación» a su legislación vigente.

Trump aparece por sorpresa como oyente en la primera jornada

La posición de Estados Unidos es no sólo importante en esta cumbre por su condición de gran contaminador planetario. También por su capacidad de influir y condicionar la posición y el voto de muchos otros países. Y pocas esperanzas hay de que esa posición vaya a ser no ya proactiva sino simplemente productiva. El presidente estadounidense, Donald Trump anunció inicialmente que no acudiría. Más aún, el equipo de Trump contraprogramó la cumbre del clima con un evento sobre libertades religiosas a celebrar a la misma hora en la propia sede de Naciones Unidas.

Finalmente, Trump si encontró hueco para la foto en el foro climático. Entró en la sala mientras acababa de hablar el primer ministro de la India, Narendra Modi, y escuchó un rato la siguiente intervención, la de la canciller de Alemania, Angela Merkel, para volver a abandonar el foro sin intervenir. El boicot de Trump a este foro oficializa la postura no ya crítica sino incluso beligerante con el consenso científico acerca de la emergencia climática.