Corea del Sur: 2 millones de animales al año en miles de granjas de carne de perro

Intensifican la presión sobre el gobierno para acabar con estas prácticas.

En 2018 se hizo viral en Corea del Sur la historia de Tori, un mestizo negro de cinco años que llevaba dos años viviendo en un refugio. Un perro callejero que un buen día fue oficialmente adoptado por el recién elegido presidente Moon Jae-in. No era una casualidad, ya que todavía como candidato, Moon había prometido hacerlo, como parte de una iniciativa más amplia para crear conciencia sobre los perros abandonados y los derechos de los animales. Poco después, a Tori se le unieron otros dos perros llegados como regalo para Moon del presidente norcoreano Kim Jong Un.

Pero las cosas avanzan lentas en Corea del Sur en este aspecto. Aunque la historia de Tori es ejemplo del progresivo cambio de mentalidades en la sociedad surcoreana, la situación es todavía grave para los canes en el país. La propiedad de mascotas ha aumentado, pero adoptar un perro en lugar de comprarlo todavía no es una práctica habitual en Corea del Sur.

Perros encerrados en jaula
Granja de carne de perro en Corea del Sur / Imagen: Extracto de vídeo rodado por activistas de HSI

Comer carne de perro: costumbre que desaparece lentamente en Corea del Sur

Y por desgracia, Corea del Sur es ampliamente conocida por su costumbre de consumir carne de perro. El número de surcoreanos que comen carne de perro ha disminuido en los últimos años. De forma paralela, se ha disparado el número de hogares que tienen perros como mascotas.

En Seúl, las estadísticas oficiales muestran que el número de restaurantes que sirven perros ha caído un 40% de 2005 a 2014. Una encuesta de Gallup Korea de junio de 2018, indica que el 70% de los surcoreanos dijeron que no comerían carne de perro en el futuro, un significativo aumento de casi treinta puntos respecto a la respuesta mayoritariamente favorable a la carne de perro de apenas tres años antes.

Cría de carne de perro a gran escala

Si bien la carne de perro se come en varios países de Asia, Corea del Sur es el único país que cría perros para consumo humano a gran escala. Se estima que se crían 2 millones de perros al año en miles de granjas de carne de perro en todo el país.

Las condiciones en estas granjas son terribles: la mayoría de los perros viven toda su vida en jaulas de alambre sin un refugio adecuado o atención veterinaria hasta que son brutalmente sacrificados, generalmente por electrocución o ahorcamiento.

Iniciativas legislativas contra las granjas de perros

Se han propuesto proyectos de ley en la Asamblea coreana para excluir a los perros de la categoría de ganado. Esto evitaría que fuesen criados para la carne. Al tiempo, la prohibición de alimentarlos con desperdicios de alimentos, también dificultaría su funcionamiento como negocios.

Los activistas creen que si salen adelante estos proyectos de ley, la industria de la carne de perro, que ya se está reduciendo aceleradamente, podría acabar desapareciendo.

Programa de apoyo para el cierre de las granjas

Humane Society International (HSI) cuenta con un programa pionero, desde 2015, que trabaja con criadores de perros coreanos para rescatar a sus perros y hacer la transición de los granjeros a medios de vida más humanos y rentables. Los granjeros firman un contrato de 20 años, estipulando que no criarán perros, y las jaulas son demolidas para garantizar que ningún animal sufrirá en la propiedad en el futuro.

En cada cierre de la granja de carne de perro, un veterinario vacuna a los perros contra el virus H3N2 (gripe del perro), la rabia, y otras patologías. HSI luego pone en cuarentena a los perros en la granja o en un refugio temporal sin perros permitidos dentro o fuera antes del transporte al extranjero. Los perros reciben otro chequeo antes de su vuelo para asegurarse de que estén lo suficientemente saludables como para volar. Hasta ahora, HSI ha salvado así a más de 2.000 perros de granjas de carne de perro coreanas. Los perros son llevados a los Estados Unidos, Canadá y el Reino Unido para su adopción.