Se prevé que 389 de 604 especies de aves de América del Norte perderán una parte significativa del hábitat adecuado donde pueden vivir si las temperaturas globales promedio se calientan 3º C por encima de los tiempos preindustriales. Estas aves requieren ciertos rangos de temperatura y precipitaciones que se reducirán a medida que el cambio climático provoca un incremento de las temperaturas cálidas en norte de la Tierra, según un estudio del grupo conservacionista National Audubon Society, con sede en Estados Unidos.
Si el cambio climático continúa con su actual ritmo, dos tercios de aves del norte de América se verán afectadas por la reducción de sus hábitats. En especial, los expertos predicen que las más perjudicadas serán las aves boreales como el buho de las nieves (Bubo scandiacus) el arrendajo de Canadá (Perisoreus canadensis) y las aves de los bosques occidentales como el azulejo de montaña (Sialia currucoides).
Aves de bosques boreales en peligro
La situación es similar también en los bosques boreales. El bosque boreal tiene una capacidad limitada para expandirse hacia el norte a medida que se ve superado por árboles caducifolios adaptados a temperaturas más cálidas en el sur, ya que más al norte es demasiado rocoso por lo que muchos árboles y plantas no van a ser capaces de colonizar fácilmente ese tipo de geología.
Según el informe, eso supone que algunos lugares podrían perder hasta cien especies que actualmente se reproducen allí. Otras aves del Ártico como la perdiz nival (Lagopus muta) y el escribano lapón (Calcarius lapponicus); y especies boreales como el carbonero boreal (Poecile hudsonicus), el trepador canadiense (Sitta canadensis) y el gorrión de garganta blanca (Zonotrichia albicollis) se verán especialmente afectadas.
Las aves del Ártico, como el búho de las nieves, no tendrán adónde ir cuando las temperaturas más cálidas se desplacen hacia el norte, predice el estudio. Además de casi todas las aves árticas y boreales también se verán perjudicadas una gran proporción de aves de bosque occidentales y muchas aves acuáticas, como el pato negro americano (Anas rubripes) y la cerceta común (Anas crecca).