Un ejemplar de águila calzada a la que se encontró todavía con vida pero que no se pudo salvar.
Un vecino de Oleiros, municipio vecino de la ciudad de A Coruña, que caminaba por la zona natural de Dexo, encontró en una zona de zarzas un ejemplar malherido de águila calzada (Hieraaetus pennatus). El animal fue trasladado al cercano Centro de Recuperación de Fauna Salvaxe de Santa Cruz, situado en el mismo ayuntamiento. Allí pudo constatarse que las heridas habían sido provocadas por arma de fuego y se intentó salvar su vida. No obstante, debido a la gravedad de las heridas causadas por el disparo tanto en el cuello como en la cabeza del animal, no se pudo hacer nada más que proceder a una eutanasia controlada para que no siguiese sufriendo.
Se trata de un ave que habitualmente se traslada en invierno hacia el continente africano y que tiene durante épocas de temperaturas más altas uno de sus pocos hábitats en la zona norte en esta área. Se ha solicitado por parte de los ambientalistas la investigación por parte del Seprona para identificar al autor del disparo. El ave fue abatida en las inmediaciones del área protegida por la Red Natura 2000. Hay que recordar que se trata de una especie legalmente protegida y que los responsables o responsable de su muerte se enfrentan a castigos de cárcel de hasta tres años y multas de hasta doscientos mil euros.