
Análisis de grandes huellas del Cretácico Inferior en Corea del Sur.
La publicación Scientific Reports se hace eco en junio de 2020 del descubrimiento de grandes huellas bien conservadas que pertenecen a un antepasado de cocodrilos modernos de la Formación Jinju del Cretácico Inferior de Corea del Sur. El estudio sugiere que las huellas encontradas anteriormente, que se creía que fueron creadas por pterosaurios gigantes que caminan sobre dos patas, pueden haber sido creadas por antiguos parientes de cocodrilos.
Kyung Soo Kim, Martin G. Lockley y sus colegas descubrieron múltiples conjuntos de huellas durante la excavación en el sitio Sacheon Jahye-ri, cerca de la ciudad de Sacheon, en Corea del Sur. Las pistas, que los autores llaman Batrachopus grandis- pertenecen a una nueva especie de cocodrilomorfo, que son ancestros de los cocodrilos actuales.
Una forma de andar inusual en estos especímenes
Las huellas son más del doble de grandes que las de batracopodid encontradas anteriormente e incluyen longitudes de huella de 18-24 cm, lo que indica una longitud del cuerpo de hasta tres metros. Las marcas fueron hechas completamente por las extremidades posteriores, con claras impresiones del talón a los pies y rastros de la piel en algunas áreas. No hay evidencia definitiva, ya sea de huellas posteriores que cubran las hechas por los pies delanteros o la conservación deficiente de la huella, para sugerir que fuesen hechas por un crocodilomorfo de cuatro patas, lo que indica que B. grandis representa animales que caminaron sobre dos patas. Esta es una forma de andar que no se había visto previamente en especímenes de vías pertenecientes a esta familia.
Los hallazgos sugieren que las huellas encontradas en sitios más recientes, originalmente creados por pterosaurios gigantes capaces de caminar sobre dos patas para proteger sus alas cuando están en tierra, pueden pertenecer a crocodilomorfos. Esto respalda el consenso general sobre los pterosaurios y su desplazamiento y resalta la necesidad de volver a examinar otros especímenes morfológicamente similares de este período en la historia.
En 2015, paleontólogos estadounidenses habían presentado en la misma publicación su análisis del Carnufex Carolinensis, un cocodrilomorfo de alrededor de tres metros de alto que vivía en la tierra, y caminaba sobre sus patas traseras. Ese especímen habría vivido en ecosistemas del área de lo que en la actualidad es el estado de Carolina del Norte en el Triásico Tardío.