La decisión de PP y Ciudadanos en Villarrobledo agita las redes.
Nos piden desde Castilla La Mancha que nos hagamos eco de un caso que está agitando la indignación. Hace cuatro años, el gobierno municipal de Villarrobledo, liderado por el PSOE con el apoyo del grupo Se Puede Villarrobledo (SPV), tomaba una decisión algo más que simbólica respecto a la tortura taurina. El presupuesto que se venía destinando a la tauromaquia en el municipio pasaba a financiar la compra de libros de texto y material escolar.
¿Podría alguien oponerse a una medida de tanto sentido común? Cuatro años después tenemos la respuesta.
PP y Ciudadanos, no a los libros, si a los toros
Las recientes elecciones han traído un cambio al reparto de asientos municipales y el PP gobierna ahora desde hace pocas semanas con el apoyo de Ciudadanos. De hecho, el nuevo alcalde es Valentín Bueno, el también senador por el Partido Popular. Y parece que también ha tratado de hacer una acción simbólica prioritaria en su mandato… pero en sorprendente sentido inverso.
Si hace un año hasta 119 familias del municipio se beneficiaban de estas ayudas para libros de texto y material escolar, ninguna lo hará desde ahora. PP y Ciudadanos han arrancado el mandato firmando en tiempo récord la supresión de estas ayudas al tiempo que acordaban destinar casi 10 mil euros para corridas de toros. El Ayuntamiento ha acordado además la cesión de la plaza de toros gratis a la empresa que organizará los espectáculos y la colaboración de la policía municipal y organización y acondicionamiento de la misma.
El alcalde ha amagado ahora, ante las críticas, con cancelar el festejo taurino, aunque en declaraciones al diario El Confidencial asegura que no restaurarán el programa de ayudas a libros. El regidor acusa de demagogia a la oposición y dice que las partidas no están relacionadas. Desde la oposición reiteran las críticas y, tal y como recoge el diario Albacete Capital, acusan a PP y Cs de gastar en toros cuando el personal municipal no ha ingresado aún sus últimas nóminas.
Así recogían la polémica esta misma semana las cámaras de Cuatro