A nivel mundial, el de 2020 ya ha sido el abril más cálido desde que hay registros.
El centro de investigación Berkeley Earth confirmaba a mediados de este mes de mayo de 2020 que, desde que comenzaron los registros en 1850, el abril de 2020 fue el abril más cálido de la historia (el anterior récord se había marcado en abril de 2016). Además, tal y como ya se había venido pronosticando, crece la convicción de que para el resto de 2020 hay un 60% de posibilidades de que 2020 sea un nuevo año cálido récord.
La temperatura media global en abril de 2020 fue de 1,13 ºC ± 0,06 ° C (2,03 ± 0,11 ° F) por encima del promedio de 1951 a 1980. Esto es equivalente a estar 1,52 ºC ± 0.07 ° C (2.74 ± 0.13 ° F) por encima del promedio de 1850 a 1900, que se usa con frecuencia como punto de referencia para el período preindustrial.
Anómala situación de las temperaturas en Asia
En los primeros cuatro meses del año 2020 la situación en la Tierra ha estado marcada por temperaturas superiores a la media en casi todas partes, pero sorprenden las condiciones especialmente extremas en toda Asia. El Berkeley Earth estima que el promedio de enero a abril fue récord cálido para el 8.8% de la Tierra, y apreciablemente por encima del promedio de 1951 a 1980 para el 84% de la Tierra.
Los promedios de enero a abril para Asia, Europa y América del Sur establecieron máximos históricos. Pero las condiciones en Asia durante enero a abril de 2020 merecen una consideración especial para los investigadores. En Rusia, se estableció un nuevo promedio récord para este período en más de 1.7 ° C (3.1 ° F) por encima del récord anterior de 2017, y 6.0 ° C (10.8 ° F) por encima del promedio de 1951-1980. De hecho, 2019 ya se había cerrado con temperaturas sin precedentes en Rusia. La esperada nieve que por ejemplo acostumbra cubrir la capital, Moscú, desde comienzos de noviembre, no había llegado a un en diciembre cuando la temperatura habitual bajo cero no llegaba. Al filo de la Navidad, conocíamos incluso que desde el jardín botánico de la universidad estatal moscovita informaban de que algunas plantas estaban confundiendo esta situación con el inicio de la primavera, empezando a asomar sus flores en esa época. Advierten los investigadores que esta tendencia de calor prolongado ya ha contribuido a los grandes incendios forestales de principios de temporada, y puede acelerar la pérdida de permafrost.
Dos pronósticos posibles para el resto del año
Por un lado los investigadores consideran que es casi seguro que 2020 será uno de los 3 años más cálidos desde 1850. Podrían repetirse así condiciones extremas como las vistas en la zona ártica en 2019. Aunque también comentan las probabilidades de que se desarrolle el fenómeno conocido como La Niña antes de fin de año. Si ocurre La Niña, presumiblemente empujará las temperaturas globales hacia la porción más baja del rango proyectado.
De momento, abril de 2020 continúa el patrón continuo de calidez generalizada. Condiciones muy cálidas estuvieron presentes también tanto en el Ártico como en la Antártida, así como en partes de África, América del Sur y América Central.